En esta oportunidad te presento al Telenomus Remus un avispa parasitoide, depredador natural del gusano cogollero del maíz, Spodoptera frugiperda.
Este pequeño insecto es utilizado con éxito en programas de control biológico en diversas regiones del mundo gracias a su eficacia, especificidad y bajo impacto ambiental. ¡Es como tener un ejército microscópico que trabaja las 24 horas para proteger tus cultivos!
Lo más interesante es que este especimen no mata directamente a la plaga adulta, sino que interrumpe su ciclo de vida desde la raíz: los huevos. Su estrategia consiste en localizar y parasitar los huevos de estas plagas, impidiendo que lleguen a convertirse en larvas destructoras.
Este método inteligente y ecológico ha sido una revolución en el manejo integrado de plagas, permitiendo reducir el uso de insecticidas tóxicos y preservar los insectos benéficos. ¿Estás listo para descubrir cómo funciona esta maravilla natural?
Clasificación Taxonómica
¿Sabías que esta pequeña avispa es parte de una familia enorme de parasitoides que han evolucionado con una precisión quirúrgica para localizar y neutralizar huevos de plagas agrícolas? Su clasificación taxonómica nos da una pista sobre su especialización, parentescos y comportamiento evolutivo. Aquí te lo dejo en formato ordenado para que lo tengas claro:
- Reino: Animalia
- Filo: Arthropoda
- Clase: Insecta
- Orden: Hymenoptera
- Familia: Scelionidae
- Género: Telenomus
- Especie: Telenomus remus
Este tipo de clasificación no es solo nomenclatura científica; tiene implicancias prácticas. Por ejemplo, el hecho de que pertenezca al orden Hymenoptera lo emparenta con otros insectos benéficos como las abejas y las hormigas. Además, su pertenencia a la familia Scelionidae indica que su ciclo de vida está fuertemente ligado a la parasitación de huevos.
¿Qué es Telenomus Remus?
El Telenomus remus es una avispa parasitoide microscópica, perteneciente a los insectos del orden Hymenoptera, conocida por su impresionante capacidad para parasitar huevos de lepidópteros plaga.
A pesar de su tamaño minúsculo, no supera el milímetro de longitud, juega un papel colosal en los sistemas agrícolas. En cuanto a su filogenia, forma parte de una línea evolutiva muy especializada que ha desarrollado una precisión casi quirúrgica para localizar los huevos de plagas del género Chrysodeixis y Helicoverpa.
El nombre «Telenomus» proviene del griego y significa «mente distante» o “mente a distancia”, probablemente en alusión a su aguda capacidad sensorial para encontrar huevos ocultos en la vegetación. El epíteto «remus» no está del todo claro, aunque algunos lo relacionan con el personaje mitológico romano, quizás aludiendo a su comportamiento protector.
En varios contextos agrícolas se le conoce informalmente como “avispa del huevo del cogollero”. A pesar de su apariencia casi invisible, este insecto ha ganado notoriedad entre agricultores, técnicos y entomólogos, precisamente por el papel que juega como depredador indirecto de plagas devastadoras. ¿Increíble, no?
Origen Geográfico y Área de Distribución
Telenomus remus tiene su origen documentado en el sudeste asiático, específicamente en regiones tropicales de la India y Pakistán, donde fue identificado por primera vez como un parasitoide eficaz contra huevos de Spodoptera.
Desde allí, su uso y distribución se ha expandido rápidamente hacia otros continentes gracias a su efectividad comprobada en ambientes cálidos y húmedos. Hoy en día, se encuentra en uso activo en América Latina (incluyendo Perú, Brasil, Colombia y México), partes de África como Nigeria y Sudáfrica, y regiones de Asia tropical. También se ha introducido exitosamente en varios países del Caribe y Centroamérica como parte de programas de manejo integrado de plagas.
¿Y en qué tipo de hábitats prospera? Esta avispa se adapta muy bien a zonas agrícolas con climas cálidos, especialmente campos de maíz, soya, algodón y arroz.
Aunque puede sobrevivir en condiciones más frías, su actividad parasitaria disminuye significativamente. Es importante resaltar que su alta adaptabilidad y capacidad de establecer poblaciones estables en condiciones agrícolas lo hacen una opción viable para programas de liberación inoculativa y aumentativa.
Características Físicas

Telenomus remus es una avispa parasitoide pequeña, con una longitud corporal que varía entre 0.44 y 0.80 mm, medida desde la cabeza hasta el extremo del metasoma.
Su cuerpo presenta un color negro oscuro, brillante y aplanado dorsoventralmente, lo que le proporciona un perfil eficaz para infiltrarse entre los huevos de sus hospedadores.
La cabeza es redondeada, con ojos compuestos bien desarrollados que le permiten detectar movimientos y contrastes en su entorno, claves para localizar los huevos de sus hospedadores.
Además, posee antenas filiformes y segmentadas: el escapo y los flagelómeros de las hembras son de color marrón oscuro y están altamente especializados para detectar señales químicas (kairomonas) emitidas por los huevos de lepidópteros, facilitando la localización del hospedador.
Sus patas son delgadas pero resistentes, adaptadas para caminar sobre superficies vegetales y posicionarse sobre los huevos que va a parasitar. Las alas, completamente desarrolladas en los adultos, son transparentes y tienen venación reducida, lo que les permite desplazarse cortas distancias entre plantas.
Otra característica distintiva es el mechón largo presente en las alas posteriores, que sobrepasa el margen del ala y le ayuda en maniobras de vuelo ágil entre la vegetación .
La estructura interna y el desarrollo larval de T. remus también revelan una morfología adaptada al parasitismo endógeno. El huevo de la avispa, de forma ovalada y de color cremoso claro, mide cerca de 310 µm de largo por 281 µm de ancho.
Luego, las larvas atraviesan dos estadios diferenciados: la primera, transparente y redondeada (~305 µm), y la segunda, más opaca y ligeramente alargada (~327 µm), mostrando ya un brote de diferenciación interna con puntos oculares rojizos.
Esta rápida y específica metamorfosis permite que la larva se desarrolle completamente en el interior del huevo del hospedador, transformándose en pupa y, tras unos días, en adulto listo para emergir, perforando el cascarón vacío del huevo receptor.
Biología y Ciclo de Vida de Telenomus Remus
Fases de Desarrollo
El ciclo de vida de Telenomus remus es corto, eficiente y completamente adaptado a su rol como parasitoide. En condiciones óptimas de temperatura (25–30 °C), el proceso completo desde huevo hasta adulto puede durar entre 9 y 12 días.
Todo comienza cuando la hembra localiza un huevo de lepidóptero, como los del temido gusano cogollero, y deposita dentro un solo huevo propio, utilizando su ovipositor especializado. Este evento marca el inicio del ciclo de vida: el huevo del huésped parece intacto, pero está comprometido.
Poco después, emerge una larva de Telenomus dentro del huevo parasitado. Esta larva consume los tejidos internos del huevo huésped, interrumpiendo su desarrollo por completo. Luego, la larva entra en fase de pupa dentro del mismo huevo, donde permanece encapsulada mientras se transforma en adulto.
Una vez completada la metamorfosis, el nuevo adulto perfora el cascarón vacío y emerge listo para buscar nuevos hospedadores. Este desarrollo endoparasitoide (dentro del huevo) y solitario (una sola cría por huevo) le da una ventaja enorme, ya que minimiza la competencia y asegura recursos suficientes para cada descendiente.
Mecanismo de Parasitismo
Una sola hembra puede parasitar entre 100 y 300 huevos a lo largo de su vida adulta, dependiendo de factores como temperatura, disponibilidad de hospedadores y calidad del alimento.
¿Cómo lo logra? Mediante un comportamiento llamado «localización activa«, donde utiliza señales químicas (kairomonas) emitidas por los huevos del hospedador o por los residuos de oviposición de las plagas. La hembra inspecciona cada huevo con sus antenas antes de insertar su ovipositor para asegurarse de que el huevo es adecuado.
La longevidad de las hembras es relativamente corta, de 5 a 10 días en condiciones naturales, pero su capacidad de oviposición se concentra en los primeros días de vida. Por eso, cuando se liberan en campo o en invernadero, el éxito depende de sincronizar su presencia con la fase de oviposición de las plagas.
Además, las hembras requieren pequeñas cantidades de carbohidratos para mantenerse activas; por eso, a veces se complementa su dieta con soluciones azucaradas si se crían en laboratorio. En resumen, en términos de eficiencia reproductiva, estas avispas son pequeñas fábricas de biocontrol. ¿Increíble lo que pueden hacer en tan pocos días, verdad?
Factores Ambientales que Influyen
El rendimiento de Telenomus remus en el campo no solo depende de su biología, sino también de las condiciones ambientales. La temperatura es uno de los factores más determinantes: temperaturas entre 25 °C y 30 °C favorecen una tasa óptima de desarrollo, mayor parasitismo y mayor fecundidad.
Si el ambiente es demasiado frío (menos de 18 °C), el desarrollo se ralentiza significativamente, y si supera los 35 °C, la mortalidad de pupas y adultos aumenta. ¿Cultivas en una región cálida y tropical? Este insecto probablemente se adaptará muy bien a tu entorno.
La humedad relativa también juega un rol importante. Valores entre 60 % y 80 % favorecen la eclosión de huevos y la supervivencia de las larvas y pupas.
Ambientes muy secos pueden afectar negativamente su eficacia, ya que los huevos parasitados se desecan más rápido. Además, la presencia de coberturas vegetales o cultivos asociados puede influir positivamente en su comportamiento, proporcionándole refugio y microclimas favorables.
En condiciones controladas, como invernaderos, se puede ajustar el microambiente para maximizar su éxito. En campo abierto, conocer el clima local y monitorear el estado fenológico del cultivo puede ayudarte a decidir el mejor momento para liberar estos aliados diminutos.
Control Biológico

Especies de Plaga Objetivo
El principal objetivo de Telenomus remus en programas de control biológico es el gusano cogollero del maíz, Spodoptera frugiperda, una plaga que ha causado estragos en cultivos desde América hasta África.
Este noctuido deposita sus huevos en masas, lo que resulta ideal para que las hembras de Telenomus parasiten múltiples huevos en una sola visita.
Pero este pequeño parasitoide no se limita a una sola especie: también se ha documentado su eficacia contra Spodoptera litura, Spodoptera exigua, Chrysodeixis includens y Helicoverpa armigera, todos lepidópteros de gran importancia agrícola en regiones tropicales y subtropicales.
Lo fascinante es que su especificidad hacia huevos de lepidópteros limita los efectos no deseados en insectos benéficos. ¿No es genial contar con un aliado tan preciso? Esta especialización convierte a esta avispa en una herramienta de alto valor dentro del manejo integrado de plagas (MIP), ya que puede insertarse sin desequilibrar el ecosistema.
Además, su capacidad para adaptarse a distintas especies de noctuidos ofrece una versatilidad estratégica: basta con que se detecten los huevos de la plaga para que entre en acción y frene la siguiente generación. En pocas palabras, es una barrera natural contra el avance de las plagas.
Resultados en Campo
Los resultados en campo hablan por sí solos. En países como Brasil, Colombia y México, los programas de liberación de Telenomus remus han logrado reducir significativamente las poblaciones de Spodoptera frugiperda, alcanzando tasas de parasitismo de hasta un 88 % (con densidades de 12 hembras/m² se registraron hasta 88.3 %) y un promedio valorado en ~80 %.
Este nivel de control ha sido reproducido en sistemas agrícolas diversos: en monocultivos de maíz, sistemas policulturales (maíz–frijol–calabaza) se observaron tasas de parasitismo entre 86 % y 99 % dependiendo de la variedad . En Colombia y México, los estudios de campo reportan valores similares, variando entre 60 % y 100 % en condiciones bien manejadas .
En campos de maíz, arroz y sorgo, los agricultores han observado una reducción clara del daño foliar y a las mazorcas tras varias liberaciones sucesivas. ¿Te imaginas cosechar con menos insecticidas y frutos más limpios? Este es el escenario que han vivido múltiples parcelas demostrativas en América Latina, con mejoras visibles en la salud general del cultivo y rendimiento potencial.
En África, tras la invasión del gusano cogollero en 2016, se implementaron proyectos piloto en Nigeria, Ghana y Kenia, con apoyo de organismos internacionales. Estas iniciativas confirmaron la rápida adaptación de T. remus a condiciones locales y generaron reducciones significativas en el daño al cultivo, además de una percepción positiva por parte de los agricultores .
En Asia, especialmente en India y Bangladesh, esta avispa forma parte de planes nacionales para reducir la dependencia de pesticidas en arroz y algodón. Las campañas muestran un cambio de paradigma hacia un manejo más sostenible, con adopción creciente por parte del sector agrícola.
Crianza Masiva y Liberación
Métodos de Producción
Para que Telenomus remus pueda ser liberado de forma efectiva a gran escala, es indispensable contar con sistemas de cría masiva. Aunque su hospedador natural es el huevo de Spodoptera, utilizar esta especie para criarlo sería costoso y complicado. Por eso, se han desarrollado métodos alternativos utilizando hospedadores facticios como Corcyra cephalonica, un lepidóptero fácil de criar en laboratorio.
Estos huevos son depositados en papel encerado, esterilizados por rayos UV o calor, y luego expuestos a las hembras de Telenomus para que los parasiten. ¿Ingenioso, no?
El uso de huéspedes facticios permite mantener colonias estables, económicas y sin riesgo de liberar plagas accidentales. Además, facilita el almacenamiento y transporte del material parasitado.
En instalaciones especializadas, se crían millones de parasitoides semanalmente, listos para ser enviados a zonas agrícolas vulnerables. La clave está en mantener buenas condiciones de humedad (60-70 %) y temperatura (25-28 °C) para asegurar una alta tasa de parasitismo y buena viabilidad de las pupas.
Costos y Viabilidad Económica
A primera vista, uno podría pensar que criar insectos es más caro que comprar un pesticida, pero al analizar el panorama completo, el uso de Telenomus remus resulta altamente rentable.
En promedio, el costo de producción por millón de individuos puede ser menor que una sola aplicación de insecticida en grandes cultivos, especialmente si se utilizan instalaciones comunitarias o cooperativas. Además, como es un método preventivo y persistente, su impacto se extiende más allá de la fecha de liberación. ¡Menos aplicaciones, menos residuos, más beneficios!
En Brasil, por ejemplo, hay cooperativas agrícolas que producen su propio material biológico y han reportado ahorros del 30 % en costos de manejo de plagas. En Colombia, proyectos financiados por universidades han demostrado que la liberación de Telenomus en arrozales incrementa el rendimiento por hectárea.
Cultivos Beneficiados
El uso de Telenomus remus ha demostrado ser una solución efectiva y económica en varios cultivos claves para la seguridad alimentaria y la agricultura comercial. El más beneficiado, sin lugar a dudas, es el maíz, donde combate directamente al gusano cogollero (Spodoptera frugiperda), una de las plagas más agresivas en América y África.
Gracias a su acción durante la fase de huevo, evita que las larvas lleguen a alimentarse del cogollo, protegiendo el crecimiento de la planta desde etapas tempranas. Pero su utilidad no termina ahí. También ha mostrado excelentes resultados en arroz, sorgo y trigo, donde otras especies de Spodoptera y noctuidos causan pérdidas significativas.
Otros cultivos beneficiados incluyen el algodón, donde puede actuar contra Helicoverpa armigera, así como la soya, ajíes, tomates y hortalizas de hoja. ¿Tienes problemas de plagas en alguno de estos cultivos? Entonces esta avispa podría ser parte de tu solución.
Incluso en plantaciones de caña de azúcar, banano y pastos, se ha explorado su uso con resultados prometedores. En sistemas agroecológicos diversificados, se recomienda como parte del enfoque preventivo, ayudando a mantener el equilibrio biológico.
Dosis y Métodos de Liberación
La densidad recomendada varía según el cultivo y el grado de infestación. En Ghana, por ejemplo, se colocaron sobres de papel no sellados que contenían aproximadamente 300 huevos parasitados cada uno, distribuidos cada 10 m dentro de surcos de maíz, y a una distancia entre hileras de 10,4 m (todas las quintas filas se omitieron para evitar bordes).
En conjunto, se liberaron unas 15 000 avispas por cada 0,5 ha, con aplicaciones repetidas cada dos semanas, empezando entre 14 y 20 días después de la siembra, dependiendo de la temporada.
Por otro lado, un estudio en Brasil evaluó la eficacia de diferentes densidades de hembras, encontrando que la liberación de entre 9 y 12 adultas/m² de T. remus junto con una infestación estándar de 1 masa de huevecillos por m² (≈65 huevos) dio lugar a parasitismos del 74 % al 88 %, alcanzando hasta un 88,3 % con 12 hembras/m².
Estas cifras sugieren que una dosis de 6 a 12 adultas/m² es efectiva (60,000 a 120,000 parasitoides por hectárea), aunque niveles más altos proporcionan un control aún más robusto, especialmente en cultivos como maíz, algodón y soja bajo condiciones de invernadero.
Compatibilidad con otros Agentes de Control Biológico

Una de las grandes ventajas de Telenomus remus es su alta compatibilidad con otros enemigos naturales. ¿Por qué? Porque actúa en una etapa muy específica del ciclo de vida de la plaga: el huevo. Esto significa que no compite directamente con parasitoides larvales como Cotesia glomerata, ni con depredadores generalistas como la crisopa verde (Chrysoperla carnea) o Orius laevigatus, que atacan larvas o adultos.
Esta segmentación natural permite diseñar estrategias donde cada agente actúe en un punto clave del desarrollo del insecto plaga, generando un efecto sinérgico y sin interferencias.
De hecho, en muchos programas exitosos se ha combinado a esta avispa con hongos entomopatógenos como Beauveria bassiana, que infecta y elimina larvas y pupas, logrando una cobertura casi total del ciclo de vida de la plaga.
También puede coexistir perfectamente con nematodos entomopatógenos y bacterias como Bacillus thuringiensis (Bt), siempre que se respeten los momentos y formas de aplicación.
Por ejemplo, aplicar Bt de forma focalizada sobre larvas jóvenes no afecta la actividad de Telenomus en los huevos, permitiendo una acción complementaria. ¿Tu programa MIP ya contempla múltiples actores? Incluir a Telenomus remus no solo es viable, sino sumamente recomendable si buscas ampliar el rango de acción, reducir la presión de plagas y minimizar el uso de productos químicos agresivos.
Riesgos y Limitaciones
Impacto en Especies no Objetivo
Una de las preguntas más frecuentes sobre el uso de parasitoides es: ¿afectará a otros insectos que no son plagas? En el caso de Telenomus remus, los estudios han demostrado que su especificidad es bastante alta.
Prefiere huevos de lepidópteros noctuidos, especialmente aquellos que ovipositan en masas expuestas, como Spodoptera. No parasita huevos de mariposas diurnas, ni de especies polinizadoras, ni de escarabajos ni otros órdenes. Esto reduce enormemente el riesgo ecológico asociado a su liberación.
Dicho esto, en algunos estudios de laboratorio se ha observado que puede parasitar huevos de otras especies bajo condiciones artificiales si no encuentra a su hospedador ideal.
Por eso es fundamental seguir protocolos de evaluación de riesgo ecológico antes de introducirlo en nuevas regiones. En zonas donde es exótico, debe monitorearse su comportamiento con métodos de campo, como trampas con huevos centinela. Afortunadamente, en más de 30 países donde ha sido liberado, no se han registrado impactos negativos significativos sobre especies no objetivo.
Investigaciones recientes y vacíos de conocimiento
En los últimos años, la investigación sobre esta avispa se ha enfocado en mejorar su eficacia, adaptabilidad y producción. Se están desarrollando líneas genéticas con mayor longevidad, mejor sincronización con hospedadores locales, y mayor tolerancia a temperaturas extremas.
También se estudia el efecto de las plantas hospedadoras en la atracción del parasitoide, buscando cultivos que favorezcan su presencia natural. Incluso hay trabajos con herramientas moleculares para identificar líneas genéticas más eficientes según la región. ¿Te imaginas seleccionar un linaje de Telenomus adaptado a tu zona agroclimática?
Aun así, existen vacíos por llenar. Por ejemplo, se necesita más investigación sobre su comportamiento en ecosistemas altamente biodiversos, su relación con depredadores naturales, y los efectos acumulativos de liberaciones continuas año tras año.
También falta sistematizar protocolos para zonas de altitud o clima frío, donde su eficacia disminuye. El futuro del control biológico pasa por mejorar la ciencia detrás de estos agentes naturales, y Telenomus remus es, sin duda, uno de los más prometedores. ¿Te animas a ser parte de esta nueva agricultura basada en aliados microscópicos?


