¿Estás cansado de ver tus plantaciones de habas, duraznos y rosas cubiertas de pulgones? El mejor aliado que podrías tener mide apenas unos milímetros y tiene dos puntitos negros en el dorso. Hablamos de la Adalia Bipunctata conocida tambien como Mariquita de Dos Puntos.
Este diminuto insecto no solo es bonito, sino que también es un auténtico depredador de pulgones, esos molestos chupadores de savia que debilitan brotes y hojas. Una forma eficiente de controlar las plagas de tu huerto sin usar químicos.
En los últimos años, su uso ha crecido tanto en agricultura ecológica como en jardines urbanos, donde su sola presencia puede equilibrar colonias enteras de pulgones en cuestión de días. Pero detrás de su apariencia inofensiva hay un comportamiento depredador fascinante, con estrategias de caza y reproducción que parecen diseñadas para la eficiencia.
¿Quieres saber cómo aprovechar todo su potencial y entender por qué es tan valorada por los agricultores y entomólogos? Vamos a conocerla a fondo.
Clasificación Taxonómica
Vale la pena ubicarla dentro del árbol de la vida. Su clasificación taxonómica te ayudará a entender por qué comparte rasgos con otras mariquitas y por qué se comporta como una depredadora tan especializada.
- Reino: Animalia
- Filo: Arthropoda
- Clase: Insecta
- Orden: Coleoptera
- Familia: Coccinellidae
- Género: Adalia
- Especie: Adalia bipunctata (Linnaeus, 1758)
Esta especie pertenece a la gran familia de los coccinélidos, conocidos comúnmente como mariquitas o vaquitas de San Antonio. Se diferencia de otras especies por su simplicidad de diseño: dos puntos sobre un fondo rojo o anaranjado brillante. No es casualidad que esté tan extendida, pues combina adaptabilidad con una enorme capacidad de depredación.
¿Qué es Adalia Bipunctata?
La Adalia bipunctata es una mariquita depredadora perteneciente al orden Coleoptera, el grupo de insectos con alas endurecidas que conocemos como escarabajos.
Su nombre proviene del latín: “bi” significa dos, y “punctata” se refiere a los dos puntos que adornan su élitro (esas alas duras que cubren las alas de vuelo). A lo largo del tiempo, ha recibido diversos nombres comunes como mariquita de dos puntos entre otros, dependiendo del país. Curiosamente, el término “Adalia” tiene raíces etimológicas relacionadas con nobleza, lo cual encaja perfectamente con su apariencia elegante y su papel vital en los ecosistemas agrícolas.
Dentro de la filogenia de los coccinélidos, este insecto ocupa una posición intermedia entre las especies de climas templados y aquellas más adaptadas a ambientes extremos.
Su importancia ecológica no se limita a la depredación: también actúa como indicador biológico de equilibrio ambiental, ya que su presencia suele correlacionar con ecosistemas sanos y con baja carga de pesticidas.
Distribución Geográfica y Hábitats
La mariquita de dos puntos es una especie de amplia distribución. Se encuentra principalmente en Europa, pero también ha sido introducida con éxito en América del Norte, Asia y algunas regiones del Cono Sur de América del Sur, incluyendo zonas templadas de Chile y Argentina.
Prefiere los climas moderados, con inviernos fríos y veranos templados, aunque su adaptabilidad le permite sobrevivir en ambientes urbanos, cultivos agrícolas y áreas boscosas. En jardines, suele refugiarse en hojas enrolladas, grietas de la corteza y estructuras donde puede protegerse de los depredadores.
Su hábitat ideal incluye zonas con abundancia de pulgones, ya sea en plantas ornamentales, rosales, frutales o cultivos como el trigo y la cebada. A diferencia de otras especies de mariquitas que prefieren áreas secas, este especimen tolera bien la humedad y puede encontrarse incluso en regiones costeras o de montaña.
Esto la convierte en una opción valiosa para programas de control biológico en distintos tipos de clima. ¿Te imaginas poder liberar un grupo de ellas en tu jardín y reducir drásticamente los pulgones sin químicos? Es totalmente posible, y por eso su popularidad entre los horticultores sigue creciendo año tras año.
Características de la Mariquita de Dos Puntos

La Adalia bipunctata destaca por su tamaño compacto, con una longitud entre 3,5 a 5,5 mm, y un peso casi imperceptible para el ojo humano, de apenas unos miligramos.
Su cuerpo es ovalado y ligeramente abombado, diseñado para proteger sus alas membranosas bajo los élitros endurecidos de color rojo, naranja o, en algunos casos, negro.
En la cabeza, posee antenas cortas y segmentadas que le permiten detectar vibraciones, olores y feromonas, una habilidad crucial para localizar a sus presas.
Sus ojos compuestos le ofrecen una visión panorámica eficiente para cazar y esquivar depredadores. En la parte frontal, sus mandíbulas son auténticas herramientas de precisión: cortan, sujetan y succionan los tejidos blandos de los pulgones con una rapidez sorprendente.
Sus patas, finas pero robustas, le permiten adherirse con firmeza a tallos y hojas, incluso cuando el viento sopla fuerte o las superficies están húmedas. Aunque parezca un insecto tranquilo, es una excelente voladora: al abrir los élitros despliega un par de alas finas y transparentes que le permiten desplazarse con agilidad entre plantas cercanas en busca de colonias de pulgones.
Su coloración, además de ser un rasgo estético, cumple una función defensiva: el tono brillante advierte a los depredadores sobre su sabor desagradable y posible toxicidad (un fenómeno conocido como aposematismo).
Polimorfismo
Uno de los rasgos más sorprendentes de Adalia bipunctata es su marcado polimorfismo, una característica que le permite presentar diferentes patrones y colores dentro de la misma especie. La variedad más reconocible es la forma típica roja con dos puntos negros sobre los élitros, conocida científicamente como Adalia bipunctata typica.
Sin embargo, no es la única: existe la variedad adalia bipunctata sexpustulata, que muestra un cuerpo negro brillante con dos manchas rojas o anaranjadas en cada élitro, y la variedad adalia bipunctata quadrimaculata, que combina cuatro manchas rojas intensas sobre un fondo oscuro, un diseño más frecuente en regiones frías del norte de Europa.
Estas variaciones no son simples curiosidades estéticas; reflejan adaptaciones genéticas y térmicas precisas. Las formas más oscuras, como sexpustulata y quadrimaculata, absorben mejor la radiación solar, lo que les da ventaja en climas fríos o nublados.
En cambio, las versiones más claras, como typica, reflejan parte del calor, predominando en ambientes templados o cálidos. Este equilibrio entre genética y ecología convierte a este especimen en un modelo perfecto para entender cómo los insectos ajustan su apariencia al entorno, sin perder su eficacia como depredadores naturales.
Ciclo de Vida y Reproducción de Adalia Bipunctata
El ciclo de vida de la mariquita de dos puntos es un ejemplo perfecto de metamorfosis completa, y cada una de sus etapas está perfectamente diseñada para garantizar su supervivencia y eficiencia depredadora.
Todo comienza con los huevos, pequeños, ovalados y de un tono amarillo intenso, que la hembra deposita en grupos de entre 10 y 50 unidades cerca de colonias de pulgones.
Este detalle no es casual: la proximidad al alimento asegura que las larvas, al eclosionar, encuentren su primera presa en cuestión de minutos. La incubación dura entre 3 y 5 días, dependiendo de la temperatura ambiental; cuanto más cálido el entorno, más rápido emerge la larva.
Las larvas, de color gris oscuro con motas anaranjadas, pasan por cuatro mudas (estadios larvales) durante aproximadamente dos semanas, aumentando su tamaño y voracidad a medida que avanzan.
Al alcanzar su máximo desarrollo larval, busca una superficie estable una hoja, tallo o incluso una pared del invernadero donde fijarse y comenzar su etapa de pupa. Este proceso dura entre 5 y 9 días, durante los cuales el insecto se transforma completamente en su interior.
En condiciones óptimas de temperatura (20–25 °C) y humedad (60–70 %), el ciclo completo, desde huevo hasta adulto, puede completarse en unas 4 semanas. Si las temperaturas bajan de los 15 °C, el desarrollo se ralentiza considerablemente, y en invierno pueden entrar en diapausa, una especie de “hibernación” temporal.
Esta plasticidad biológica permite criar y almacenar poblaciones de Adalia para su uso en control biológico cuando las condiciones de campo son desfavorables.
Adultos y Comportamiento Reproductivo
Los adultos de Adalia bipunctata emergen de la pupa completamente formados, con el característico color rojo brillante y sus dos puntos negros. Tras unas horas de endurecimiento de sus élitros, comienzan a cazar activamente. Su comportamiento diurno y su agudeza visual les permiten detectar colonias de pulgones a varios metros de distancia.
Curiosamente, tanto machos como hembras se alimentan de pulgones adultos y ninfas, pero las hembras tienden a ser más voraces, ya que necesitan reservas energéticas para la oviposición. En promedio, un adulto puede vivir entre 30 y 90 días en condiciones naturales, aunque en cautiverio y bajo alimentación controlada se han registrado longevidades superiores a 120 días. La longevidad está estrechamente ligada a la disponibilidad de alimento y a la temperatura ambiental, siendo 25 °C el punto óptimo para su máxima actividad.
Durante el apareamiento, que suele durar varios minutos, el macho utiliza señales químicas para atraer a la hembra. Tras la cópula, la hembra inicia la puesta de huevos, que puede superar los 400 durante su vida, distribuidos en diferentes lugares para reducir el riesgo de depredación. En periodos de abundancia de alimento, la reproducción se acelera notablemente, generando varias generaciones por temporada.
Sin embargo, cuando los pulgones escasean, las hembras pueden reducir o incluso detener temporalmente la oviposición. Este tipo de ajuste biológico es clave para la sostenibilidad de la población, ya que evita la competencia interna y maximiza las oportunidades de supervivencia.
Rol Ecológico y Alimentación de Adalia Bipunctata

Control Biológico de Pulgones
Dentro del grupo de presas favoritas de la Adalia bipunctata se encuentran especies como Aphis fabae (pulgón negro de las habas), Myzus persicae (pulgón verde del duraznero) y Macrosiphum rosae (pulgón del rosal). Estas especies suelen ser abundantes en huertos y jardines, por lo que la mariquita encuentra allí un suministro constante de alimento.
Tanto las larvas como los adultos atacan todas las etapas de los pulgones: huevos, ninfas y adultos. Sin embargo, las ninfas son las más vulnerables y las preferidas, ya que su cutícula es más blanda y fácil de perforar. El proceso de caza es rápido: la mariquita detecta la presa, la inmoviliza con sus mandíbulas y succiona los fluidos internos en pocos segundos.
En cultivos comerciales, esta eficiencia depredadora reduce significativamente las infestaciones sin afectar a otras especies benéficas. Un detalle interesante es que las larvas recién nacidas pueden consumir pulgones de tamaño similar o incluso mayores a ellas, lo que demuestra su instinto cazador desde etapas tempranas. Este nivel de agresividad natural es lo que la hace tan efectiva en programas de control biológico integrados.
Capacidad de Depredación Diaria
La capacidad de depredación de la Adalia bipunctata es notable. Una sola larva puede consumir entre 30 y 100 pulgones al día, dependiendo del tamaño y densidad de la colonia. Los adultos, por su parte, pueden devorar entre 40 y 70 pulgones diarios, lo que significa que una pequeña población puede eliminar miles de individuos en cuestión de días.
Este comportamiento no solo regula el crecimiento de la plaga, sino que también impide su propagación hacia plantas sanas. En condiciones de laboratorio, se ha demostrado que la eficiencia aumenta cuando las temperaturas rondan los 25 °C y hay una humedad moderada, ya que el insecto se mantiene más activo y con mayor tasa metabólica.
Cuando la densidad de pulgones disminuye, las Adalia tienden a dispersarse en busca de nuevas colonias, cubriendo amplias áreas de cultivo. Este patrón de movimiento las hace ideales para invernaderos o plantaciones al aire libre con focos dispersos de infestación.
Casos de Canibalismo
En situaciones de escasez de alimento, este especimen puede recurrir al canibalismo, especialmente durante la etapa larval. Las larvas más grandes pueden alimentarse de huevos no eclosionados o incluso de larvas más pequeñas, asegurando así su supervivencia.
Este comportamiento, aunque suene drástico, es común en muchos depredadores naturales y actúa como un mecanismo de autorregulación de la población. En ambientes controlados de cría, los entomólogos minimizan este riesgo asegurando una densidad adecuada de alimento (pulgones) y espacio suficiente entre individuos.
Además, la especie muestra una sorprendente flexibilidad alimenticia. En ausencia total de pulgones, puede sobrevivir consumiendo polen, melaza o incluso pequeños restos de insectos muertos. Aunque este tipo de dieta no permite la reproducción activa, sí les otorga resistencia temporal hasta que reaparezca la fuente principal de alimento.
Uso en Control Biológico Integrado (IPM)

Dosis y Metodos de Liberacion en Cultivos
En cuanto a la dosis de liberación, algunos estudios y productos comerciales reportan densidades bastante altas para lograr un control efectivo de pulgones. Por ejemplo, en ensayos de liberación masiva se han utilizado tasas que van desde 62 000 hasta 741 000 individuos por hectárea para especies de coleópteros predadores en general, lo que sugiere que Adalia podría usarse en ese rango en casos intensivos.
En productos comerciales, para cultivos de follaje u ornamentales, a menudo se recomienda aplicar alrededor de 20 larvas por metro cuadrado.
En fruitales, la norma sugiere colocar una bolsa de Adalia por cada 25 cm de diámetro de tronco y hasta 3 bolsas en árboles grandes. En cultivos tipo huerto, algunas fuentes sugieren liberar entre 5-10 individuos por planta en infestaciones leves y hasta 10-20 por planta en casos severos, repitiendo si es necesario.
Respecto a los métodos de liberación, la técnica más común es colocar los individuos (larvas o adultos) directamente sobre plantas infestadas o cerca de las colonias de pulgones. En cultivos arbóreos con Aphidalia, se libera la bolsa (contenedor ventilado) fijándola al tronco o rama cercana al punto de infestación.
En cultivos bajos o hortícolas, las larvas se distribuyen sobre las hojas o en tiras de papel cerca de las infestaciones. Algunos productos vienen con sustrato (virutas de papel u otros portadores) para mantener los insectos durante el transporte hasta que los liberes. En invernaderos, también se suele introducir los adultos al final de la tarde o en horarios frescos para reducir su vuelo inmediato y favorecer su establecimiento dentro del cultivo.
Condiciones Optimas
El rendimiento de la Adalia bipunctata en el control de pulgones depende en gran medida de las condiciones ambientales. La temperatura ideal para su actividad oscila entre 20 y 25 °C, con una humedad relativa del 60 al 70 %. En ambientes más cálidos (por encima de 30 °C), su metabolismo se acelera, pero también su consumo energético, lo que puede reducir su longevidad.
En cambio, temperaturas por debajo de 15 °C ralentizan su movimiento y disminuyen su tasa de depredación. Por eso, los criadores y agricultores que trabajan con esta especie suelen ajustar la temperatura y la ventilación del invernadero para maximizar su rendimiento.
La densidad de presa también influye directamente en su comportamiento. Cuando hay abundancia de pulgones, las larvas muestran un patrón de alimentación intensiva, mientras que, en bajas densidades, tienden a dispersarse o entrar en reposo. Mantener una población constante de presas en los cultivos puede favorecer la permanencia de las mariquitas por más tiempo.
Interacción con otras Mariquitas y Enfermedades
En la naturaleza la mariquita de dos puntos comparte su territorio con muchas otras especies de mariquitas, y eso puede generar competencia directa por el alimento. En zonas donde coexiste con especies invasoras como Harmonia axyridis (la mariquita asiática), se ha observado que esta última tiende a desplazarla debido a su mayor agresividad y capacidad reproductiva.
¿Te imaginas que incluso las mariquitas puedan competir ferozmente entre sí? Pues sí, y esta rivalidad puede reducir la eficacia del control biológico si una especie domina demasiado el ecosistema. Además, los recursos limitados como colonias de pulgones pueden ser el punto de conflicto, especialmente en cultivos cerrados o jardines con baja diversidad de presas.
Otra amenaza importante son las enfermedades microbianas, especialmente los hongos entomopatógenos como Beauveria bassiana o Metarhizium anisopliae, que pueden afectar tanto a las larvas como a los adultos. Aunque estas infecciones son naturales y regulan las poblaciones, en un contexto de control biológico se deben manejar con cuidado para no eliminar a las mariquitas benéficas.
Por eso, si estás utilizando productos biológicos en tus plantas, revisa siempre que no afecten también a tus aliados naturales. Un equilibrio entre especies es la clave: muchas veces, permitir la coexistencia de distintas mariquitas asegura una defensa más estable y diversa contra las plagas.
Compatibilidad con otros Agentes de Control Biológico
Este coleoptero se lleva bien con otros enemigos naturales de las plagas, siempre que no compitan por la misma presa o hábitat. Por ejemplo, es perfectamente compatible con especies de género Chrysoperla como la Crisopa Verde, sírfidos, y avispas parasitoides como Aphidius Colemani, que también atacan pulgones pero en diferentes etapas del ciclo de vida.
Mientras las mariquitas se centran en los pulgones visibles, los parasitoides actúan sobre los que aún están en desarrollo. ¿Lo sabías? Este trabajo en conjunto permite un control más completo y sostenido del problema.
Si estás aplicando estrategias de manejo integrado de plagas (IPM), combinar Adalia con organismos complementarios mejora la eficacia sin aumentar los costos. Solo evita usar insecticidas de amplio espectro, ya que eliminarían a todos los agentes de control indistintamente.
También se recomienda introducir a las mariquitas en fases posteriores del programa, cuando los parasitoides ya hayan actuado. Este tipo de compatibilidad no solo mejora los resultados, sino que mantiene la biodiversidad funcional de tu cultivo, algo esencial para un agroecosistema sano.
Cultivos Beneficiados por la Mariquita de Dos Puntos
Los cultivos que más se benefician de Adalia bipunctata son aquellos donde los pulgones suelen causar daños severos. Hablamos de hortalizas como el tomate, el pimiento, la lechuga, el brócoli y la col, pero también de frutales como el manzano, el duraznero y el cítrico.
¿Sabías que una sola colonia de mariquitas puede salvar una planta entera infestada de pulgones en cuestión de días? Su presencia reduce la necesidad de productos químicos, mejora la calidad del fruto y mantiene a raya la propagación de virus transmitidos por pulgones.
En cultivos extensivos, como los de trigo, maíz o alfalfa, también pueden ser útiles, aunque su efectividad depende de la densidad de presas y de la estructura del hábitat. Para optimizar su acción, se recomienda mantener bordes de vegetación natural o franjas de flores que sirvan de refugio y fuente de néctar.
Así, además de controlar plagas, estarás fomentando un equilibrio biológico sostenible. Si gestionas tus cultivos con esa visión integral, las mariquitas trabajarán para ti sin pedir nada a cambio, excepto un entorno sano.
Preguntas Frecuentes
¿Cuántos pulgones puede comer un individuo al día?
Un solo adulto de Adalia bipunctata puede devorar entre 50 y 100 pulgones al día, dependiendo de la temperatura y disponibilidad de presas. Las larvas, que son igual de voraces, consumen entre 30 y 60 pulgones diarios.
Imagina tener una docena de estos cazadores naturales en tu jardín: en pocos días notarías una reducción drástica de las colonias. Este ritmo de depredación convierte a la especie en una de las más efectivas dentro del control biológico natural y comercial.
¿Se puede criar Adalia bipunctata en casa?
Sí, se puede. De hecho, criar la mariquita de dos puntos en casa es una excelente manera de contribuir al control natural de plagas. Solo necesitas un pequeño contenedor ventilado, temperatura estable (entre 20 °C y 25 °C), y una fuente constante de pulgones o presas alternativas como huevos de polilla.
En unos pocos días verás el desarrollo de larvas activas y, tras un par de semanas, las primeras pupas. Eso sí, evita liberar las mariquitas en interiores, ya que necesitan luz natural y plantas vivas para sobrevivir.
¿Es peligroso para otros insectos benéficos?
No, este insecto no representa una amenaza significativa para otros insectos benéficos. Su dieta se centra casi exclusivamente en pulgones, y rara vez atacará a otros depredadores a menos que no haya alimento disponible.
Esto la convierte en una aliada ideal dentro de un ecosistema equilibrado, donde cada especie cumple su función sin interferir con las demás. ¿El mejor consejo? Combínala con otros agentes biológicos complementarios para maximizar los resultados de tu manejo ecológico y mantener tu jardín o cultivo sano de forma natural.


